viernes, 19 de octubre de 2018

ACTIVIDAD 4: La prosa griega: Las Fábulas

RECUERDA:
La creación de las fábulas se atribuye a ESOPO (s. VI a.C).
Se trata de un relato breve, protagonizado por animales (personificados), del que se extrae una enseñanza moral.

ACTIVIDAD:
1. Lee la siguiente selección de fábulas de Esopo.
2. Busca otras fábulas similares (en temática, protagonistas, etc.) pertenecientes a la tradición de fábulas en castellano.
3. Finalmente, crea una entrada en tu blog en la que incluyas sendas fábulas (estableciendo las relaciones con la obra de Esopo).

Los autores de fábulas en castellano que debes buscar son los siguientes: 
-       - Arcipreste de Hita, Libro de buen amor.
-       - Don Juan Manuel, El conde Lucanor.
-       - Tomás de Iriarte o Félix María Samaniego, Fábulas.





El león y el ratón
Dormía tranquilamente un león, cuando un ratón empezó a juguetear encima de su cuerpo. Despertó el león y rápidamente atrapó al ratón; y a punto de ser devorado, le pidió éste que le perdonara, prometiéndole pagarle cumplidamente llegado el momento oportuno. El león echó a reír y lo dejó marchar.
Pocos días después unos cazadores apresaron al rey de la selva y le ataron con una cuerda a un frondoso árbol. Pasó por ahí el ratoncillo, quien al oir los lamentos del león, corrió al lugar y royó la cuerda, dejándolo libre.
-- Días atrás -- le dijo --, te burlaste de mí pensando que nada podría hacer por tí en agradecimiento. Ahora es bueno que sepas que los pequeños ratones somos agradecidos y cumplidos.
Nunca desprecies las promesas de los pequeños honestos. Cuando llegue el momento las cumplirán.

La zorra y el cuervo gritón
Un cuervo robó a unos pastores un pedazo de carne y se retiró a un árbol. Lo vio una zorra, y deseando apoderarse de aquella carne empezó a halagar al cuervo, elogiando sus elegantes proporciones y su gran belleza, agregando además que no había encontrado a nadie mejor dotado que él para ser el rey de las aves, pero que lo afectaba el hecho de que no tuviera voz.
El cuervo, para demostrarle a la zorra que no le faltaba la voz, soltó la carne para lanzar con orgullo fuertes gritos. La zorra, sin perder tiempo, rápidamente cogió la carne y le dijo:
-- Amigo cuervo, si además de vanidad tuvieras entendimiento, nada más te faltaría realmente para ser el rey de las aves.
Cuando te adulen, es cuando con más razón debes cuidar de tus bienes.

La liebre y la tortuga.
Viendo una tortuga que hacía burla de sus pies una liebre, le dijo riendo: ¿Quieres que apostemos a quién corre más? Tú te burlas de mis pies, pero, si quieres, verás que soy más ligera que tú.
La liebre respondió:
-Bien sabes lo veloz que soy en correr, pero, ya que lo quieres, elijamos un juez, que señale las condiciones de la apuesta.
Eligieron a la zorra como la más astuta de todos los animales; y esta fijó el lugar y el término de la carrera. La tortuga, fiándose de sus pies, se puso a descansar un poco y se durmió. Cuando despertó, corrió muy aprisa para llegar al término; pero fue en vano su diligencia, porque cuando llegó vio a la tortuga, que ya estaba descansando, y entonces, avergonzada, confesó que había perdido la apuesta.
Esta fábula enseña que la mayor parte de las cosas se consiguen mejor con cuidado y diligencia que con la fuerza corporal.

El lobo y el cordero.
Un cordero y un lobo, cada uno por su lado, vinieron a beber en un río. El lobo que bebía arriba, mirando al cordero que bebía más abajo, le dijo:
-¿Por qué me has enturbiado el agua que yo bebía?
- ¿Cómo te pude enturbiar el agua –respondió humildemente el cordero- siendo así que corre de donde tú estás a donde yo estoy?
El lobo no haciendo caso de la verdad ni de la razón, le dijo:
-¿Y por eso blasfemas?
-No he blasfemado –respondió el cordero.
Pero el lobo, buscando pretextos para matarlo, le dijo:
-Seis meses hace que me injurió tu padre.
-Yo en ese tiempo, -respondió el cordero- aún no había nacido.
- No obstante, me pagarás ahora su ofensa –dijo el lobo. Y arrojándose encima de él, lo devoró.
Esta fábula significa que con los malos y perversos de nada sirve la verdad ni la razón; ni vale otra cosa con ellos sino la fuerza.

Esopo, Fábulas completas, M.E. Editores.



miércoles, 17 de octubre de 2018

TEATRO GRIEGO: La tragedia.

Para guiarnos en el estudio del teatro griego, vamos a abordar los siguientes apartados:




1. ORÍGENES. (libro)
En primer lugar, hemos de saber que la palabra "teatro" significa en griego "lugar para mirar".

2. LA REPRESENTACIÓN. (libro)
- Los edificios.
- Los actores y el coro. 

3. LOS GÉNEROS TEATRALES: CARACTERÍSTICAS DE LA TRAGEDIA GRIEGA.

1.    Temas: Ciclo de Tebas, ciclo de Argos, otras historias épicas. 
2.    Personajes. Héroes o dioses que han de enfrentarse a un conflicto extremo (destino, pasiones, justicia, castigo divino…)
3.    Función del coro. El portavoz es el corifeo. Su función es básicamente lírica:
-       Comentar.
-       Replicar.
-       Sintetizar ideas principales.
-       Representar el sentir colectivo.

4.    Regla de las tres unidades: acción, lugar y tiempo.  
5.    Acción dramática: presentación de un conflicto que conduce al sufrimiento y finalmente a la muerte.
6.    Violencia en escena: no está bien vista en el teatro griego, por lo que siempre aparecen estas escenas referidas o contadas por un personaje.
7.    Acotaciones. Breves (sobre entrada o salida de personajes) e indicaciones de lugar o tiempo incluidas en los diálogos de los personajes.
8.    Función de la tragedia: la catarsis. La identificación con el héroe provoca en el espectador una purificación (catarsis, fuerte empatía), gracias a la cual se libera de sus propios sufrimientos.


El teatro griego sigue dos ciclos temáticos:

EL CICLO DE ARGOS.

Atreo se quiere vengar de su hermano Tiestes porque había cometido adulterio con su esposa. Para ello, le ofrece a sus propios hijos como comida en un banquete, acto por el que es maldecido por Apolo.
Agamenón, hijo de Atreo, sacrificará a su hija Ifigenia, para que sus naves puedan atracar en Troya. A su regreso es asesinado por su mujer, Clitemnestra, y Egisto, su amante.
Los hijos de Agamenón, Electra y Orestes, se vengan matándolos. Orestes enloquece y los dioses lo perdonan.



EL CICLO DE TEBAS.

Layo visita el oráculo de Tebas, que le advierte de su destino: será asesinado por su hijo y éste tendrá hijos con su madre. Por miedo a su futuro, Layo abandona a su hijo Edipo al nacer, que es criado por el rey Pólipo.
Pasado el tiempo, Edipo acude al oráculo, que le informa de la misma profecía. Para evitar el parricidio, huye del reino y camino de Tebas mata a Layo en un incidente en un cruce de caminos. Edipo responde en Tebas a la adivinanza de la Esfinge (en la mitología griega era un demonio de destrucción y mala suerte que se representaba con rostro de mujer, cuerpo de león y alas). Es coronado rey y se casa con la reina viuda, su madre Yocasta, con la que tiene cuatro hijos: Eteocles, Polinices, Antígona e Ismene.
Al averiguar su parentesco, la reina se suicida, Edipo se castiga cegándose y se encamina al destierro.
Los dos hermanos se matan mutuamente por la sucesión en el trono. Creonte, cuñado de Edipo, hermano de Yocasta, se hace con el trono y prohíbe enterrar a Polinices como responsable. Antígona desoye la prohibición e intenta enterrarlo, pero es descubierta y se suicida. A su vez, dará lugar al suicidio de Hemón, hijo de Creonte y enamorado de Antígona, y al de su propia esposa. El final del ciclo llega con el perdón a Edipo por no considerarlo responsable de sus acciones.

4. PRINCIPALES AUTORES Y OBRAS:

ESQUILO: El tema central de sus obras es el destino.
La Orestíada (Agamenón, Las coéforas, Las euménides).
Los siete contra Tebas: Eteocles (hijo de Edipo) debe enfrentarse contra su propio hermano para defender la ciudad. 

SÓFOCLES: En sus tragedias analiza el dolor humano y la dignidad ante situaciones extremas (catarsis).
Edipo rey.
Antígona.
Electra. 

EURÍPIDES: Se centra en las pasiones de sus protagonistas, especialmente femeninas.

Medea. Una mujer agraviada y vengativa desencadena el horror más absoluto: una madre asesinando a sus propios hijos con sus manos para herir al marido que la abandona y la condena al exilio. Medea habla, por primera vez en el mundo griego, de la furia y la angustia que anidaba en los hogares atenienses: 
"Nosotras las mujeres somos el ser más desgraciado. Empezamos por tener que comprar un esposo con dispendio de riquezas y tomar un amo de nuestro cuerpo, y este es el peor de los males. Separarse del marido es escandaloso para las mujeres, no así para los varones. Cuando ellos se aburren en casa, salen a distraerse. Sin embargo, si hacemos lo mismo, no nos dejan salir diciendo que hay que cuidar a los hijos. Aseguran que, permaneciendo en casa, las mujeres evitamos peligros, mientras que el hombre, pobrecito, ha de ir a batirse a la guerra."

Medea, en conflicto con su encierro y su maternidad, acaba diciendo que preferiría librar tres guerras antes que parir una sola vez. Contagiadas por Medea, las mujeres del coro (que representa la voz de la comunidad, la de las atenienses de vida ordenada y hogareña) van abandonando también su actitud modesta y atemorizada. En un momento dado, una de ellas se atreve a decir que las mujeres no deben quedar excluidas de la filosofía, de la política, de los razonamientos sutiles y de los debates:
"Nosotras también poseemos una musa que nos acompaña en busca de la sabiduría".

Las troyanas.
La obra recrea el fin de la guerra de Troya ante un público ateniense que, comiendo pan, queso y aceitunas, esperaba con orgullo ver las hazañas del gran héroe Aquiles. Sin embargo, Euripides nos hace pasearnos entre las cenizas humeantes de Troya: una feroz matanza, un arrebato de destrucción vengativa, violaciones colectivas, el asesinato a sangre fría de un niño lanzado al abismo desde las muralla, los horrores de la guerra cayendo sobre las mujeres derrotadas. Pronto se centra en la desolación de la reina Hécuba y sus princesas, sorteadas entre los generales invasores. La víspera todavía vestían trajes lujosos y se las recibía entre reverencias. Tras una noche de matanzas y conquista, los griegos las arrastran del pelo, se las reparten y las violan.
Lo que escucharon los atenienses en aquella tarde convulsa del siglo V a. C. fue la rabia y la desesperanza de las madres del bando enemigo, que les acusaban de crueldad. Al final, la anciana Hécuba, ilumina por un incendio apocalíptico, denuncia con su boca desdentada la orfandad universal de las víctimas:
"Ay de mí, el fuego devora ya el elevado alcázar, y la ciudad entera, y las más altas murallas. El polvo y el humo, en alas de los vientos, me roban mi palacio. Se olvidará el nombre de este lugar, como todo se olvida. Tiembla, tiembla la tierra al desplomarse Troya; temblorosos miembros míos, arrastrad mis pies. Vamos a vivir en la esclavitud."
Ni qué decir tiene que Eurípides no ganó el premio en el festival de teatro de aquel año. Sin embargo, después de cada una de las grandes guerra europeas, esta obra se ha vuelto a representar; y la desdentada Hecuba ha hablado de nuevo, desde las trincheras calientes y los escombros aún sin retirar, en nombre de los atropellados por la guerra, antes de que empezásemos a olvidar.

Hécuba.
Hipólito. Hipólito, hijo de Teseo, sufre las consecuencias de la pasión de su madrastra, Fedra. 

TEATRO GRIEGO: La comedia

CARACTERÍSTICAS.
La comedia es el subgénero dramático donde se agrupan las obras que pretenden divertir mediante el humor y la sátira.

Los temas abordan los problemas de los ciudadanos: los malos magistrados, las costumbres y vicios, las corrientes filosóficas de moda, la guerra, el sexo...

Los personajes son individuos corrientes.

La finalidad esencial es la crítica mediante la parodia.
La parodia o humor se logran mediante varios recursos:
- El enredo argumental.
- Los disfraces.
- La abundancia de chistes.
- El uso de un lenguaje coloquial (a veces, hasta obsceno).


El autor más conocido es Aristófanes. Destacamos dos de sus comedias, en las que denuncia la decadencia de Atenas:
- Lisístrata
- Las nubes.

lunes, 15 de octubre de 2018

EDIPO REY, SÓFOCLES: Comentario de texto

Aquí os dejo una posible resolución del comentario de texto que planteábamos en clase:

COMENTARIO DE TEXTO: EDIPO REY, Sófocles.

[EDIPO solicita que el oráculo TIRESIAS adivine quién fue el asesino de LAYO, el rey de Tebas a quien él mismo ha sucedido tras averiguar el enigma de la ESFINGE.]
EDIPO.¿Qué has dicho? Repítelo para que lo entienda bien.
TIRESIAS.—¿No lo has entendido ya? ¿Es que hablé a una piedra?
EDIPO.—No tanto que pueda responderte; repítelo.
 TIRESIAS.—Repito que tú eres el asesino de Layo, a quien deseas encontrar.
EDIPO.—Te aseguro que no repetirás con tanto gozo la mortificante injuria que por dos veces me has lanzado.
TIRESIAS.—¿Quieres que diga otras cosas que aumentarán tu desesperación?
EDIPO.—Di cuanto quieras, que en vano hablas.
TIRESIAS.—Digo, pues, que tú ignoras el abominable contubernio en que vives con los seres que te son más queridos; y no te das cuenta del oprobio en el que estás.
EDIPO.¿Y crees que impunemente puedes continuar siempre calumniándome?
TIRESIAS.—Si; porque alguna fuerza tiene la verdad.
EDIPO.—La tiene, pero no en ti. En ti no puede tenerla, porque eres ciego de ojos, de oído y de entendimiento. [...]
TIRESIAS.—Aunque tú seas rey, te contestaré lo mismo que si fuera tu igual, pues derecho tengo a ello. No soy esclavo tuyo, sino de Apolo; de modo que el patronato de Creonte para nada lo he menester. Y voy a hablar, porque me has injuriado llamándome ciego. Tú tienes muy buena vista y no ves el abismo de males en que estás sumido, ni conoces el palacio en que habitas, ni los seres con quienes vives. ¿Sabes, por ventura, de quién eres hijo? ¿Tú no te das cuenta de que eres un ser odioso a todos los individuos de tu familia, tanto a los que han muerto como a los que viven; ni de que la maldición de tu padre y de tu madre, que en su horrible acometida te acosa ya por todas partes, te arrojará de esta tierra, donde si ahora ves luz, luego no verás más que tinieblas? [...].Entonces me voy. (Al lazarillo) ¡Eh, tú, muchacho, llévame!(…)  Me voy, pero diciendo antes aquello por lo que fui llamado, sin temor a tu mirada; que no tienes poder para quitarme la vida. Así, pues, te digo: ese hombre que tanto tiempo buscas y a quien amenazas y pregonas como asesino de Layo, ese está aquí, se le tiene por extranjero domiciliado; pero pronto se descubrirá que es tebano de nacimiento, y no se regocijará al conocer su desgracia. Privado de la vista y caído de la opulencia en la pobreza, con un bastón que le indique el camino se expatriará hacia extraña tierra. Él mismo se reconocerá a la vez hermano y padre de sus propios hijos; hijo y marido de la mujer que lo parió, y comarido y asesino de su padre.
* Comenta este texto siguiendo el modelo de comentario visto en la página 84-85 del libro de Casals.

1.     LOCALIZACIÓN.

Este texto corresponde a la obra Edipo rey, escrita por uno de los principales creadores de la tragedia griega junto a Esquilo y Eurípides, Sófocles. Sófocles es reconocido por sus aportaciones a la modernización del teatro: aumentar el número de actores y reducir la presencia del coro, adquiriendo así una mayor teatralidad a través del diálogo vivo de los actores.
Se trata de su obra más representativa perteneciente al ciclo de Tebas, una de las historias más tratadas en la tragedia griega (por ejemplo, el mismo Sófocles escribe Edipo en Colono o Antígona, pertenecientes al mismo ciclo tebano). La obra aborda el tema del dilema sobre el cumplimiento o no de la voluntad de los dioses expuesta en los oráculos.
Perteneciente al género dramático, puede llegar al receptor a través de la lectura (como hemos hecho nosotros) o a través de la representación (sigue siendo una obra representada en la actualidad como en pasadas ediciones del Festival de Teatro de Mérida, uno de los más significativos para la representación del teatro clásico).

La acción dramática seleccionada se sitúa en la primera parte de la obra, concretamente en el momento en que Edipo inicia la búsqueda del responsable de la muerte de Layo (antiguo rey de Tebas) con el fin de acabar con los males que asolan su reino. Para ello hace llamar al adivino Tiresias.

Previamente a esta escena, Edipo se dirige a la muchedumbre de ciudadanos para buscar una solución ante las desgracias que se ciernen sobre Tebas. Creonte ha sido enviado al oráculo de Delfos y trae la siguiente noticia: Apolo ha respondido que los males se deben a que la muerte de Layo no ha sido convenientemente vengada.
Posteriormente al episodio comentado, Edipo sigue con la investigación, y seguirá obteniendo datos que poco a poco revelarán la verdad sobre su origen (asesinato en un cruce de caminos, Edipo fue adoptado por los reyes de Corinto, el niño fue abandonado en un bosque y salvado, etc): es el hijo  y asesino de Layo, y ahora está casado con su madre Yocasta. Ello precipitará la tragedia: muerte de Yocasta y ceguera de Edipo.

2.     PLANO DE CONTENIDO.

A.  ARGUMENTO. Edipo ha hecho llamar a Tiresias, anciano adivino que conoce todos los oráculos, para que le desvele lo que sabe acerca del asesinato de Layo.  Con lenguaje enigmático (no tanto para el público), Tiresias afirma que el asesino es el propio Edipo, e incluso anuncia el terrible final para dicho asesino cuando se descubra la verdad.

B.   TEMA. El tema o idea central del texto es el anuncio enigmático del terrible destino que se cierne sobre Edipo.

C.     ESTRUCTURA INTERNA.
El texto se estructura en dos núcleos esenciales:
a.      El diálogo entre Edipo y Tiresias. En dicho diálogo, muy vivo y lleno de réplicas, se enfrentan ambos personajes y se observa el enfado y consternación de Edipo ante las oscuras palabras amenazantes de Tiresias.
b.     El parlamento de Tiresias. El adivino responde sin miedo y desvela, aunque siempre desde un lenguaje confuso, todo el asunto para el que fue llamado (anticipando para el público el desenlace de la obra).

D.     ESTRUCTURA EXTERNA.
El texto está escrito en prosa. Se trata de un diálogo con acotaciones entre Edipo y Tiresias. En este caso no aparecen intervenciones del coro.

3.     ANÁLISIS DE LAS CARACTERÍSTICAS LINGÜÍSTICAS Y LITERARIAS.

A.     ACCIÓN. La acción dramática se inicia en un momento de tensión entre los dos personajes, al acusar Tiresias a Edipo del asesinato de Layo. Sin embargo, el clímax se desencadena en el momento en que Tiresias anuncia que se marchará, pero “diciendo antes aquello por lo que fui llamado”, y que es su forma de desvelar la tragedia de Edipo (aunque solo para el público, que tiene todas las claves sobre la historia.)

B.     PERSONAJES.
Edipo, en su categoría de rey, se muestra como un héroe típico de la tragedia griega: se enfrenta al conflicto con mucha dignidad. En este fragmento, concretamente se muestra muy duro con Tiresias ante la velada acusación de este. No obstante, aquí vemos que es un personaje “cegado”, que no quiere comprender, porque no alcanza su razón para semejante acusación. Así lo define Tiresias: “tú ignoras el abominable contubernio”, “y no te das cuenta del oprobio”, etc.

Tiresias se presenta ante el rey Edipo como un personaje muy digno, a su mismo nivel: “te contestaré lo mismo que si fuera tu igual, pues derecho tengo a ello”. Está ofendido incluso:: “Yo voy a hablar porque me has injuriado llamándome ciego” (toda la ironía se encierra en este calificativo), cumpliendo así con su labor de servicio a Apolo.

En este caso no aparece el coro (sin embargo, y a partir de la lectura de toda la obra, podemos hacer analizar brevemente su postura y comportamiento: representan a los ciudadanos tebanos. Muestran también una evolución durante la obra:
1º. Demuestran su apoyo incondicionalmente a Edipo.
2º. Muestran sus dudas.
3º. Lamentación final por el desenlace trágico.)

Por otro lado, se menciona a Creonte y a Apolo:
- Creonte: es el cuñado de Edipo, hermano de su esposa Yocasta, y Tiresias alude a él porque se le acusa de estar aliado con este para desterrar a Edipo del trono.
- Apolo: es el dios de la sabiduría, y a él estaba consagrado el famoso oráculo de Delfos. Por ello, Tiresias dice: “No soy esclavo tuyo, sino de Apolo”.

C.     ESPACIO Y TIEMPO.
La acción de toda la obra se desarrolla en torno al palacio de Edipo en Tebas. Aunque no se especifica, sí aparece nombrado en el texto: “ni conoces el palacio que habitas”.
A lo largo de la obra, y como espacios relatados se alude a Delfos (donde se encuentra el oráculo) y Corinto (reino del que procede Edipo, donde lo adoptaron)
En cuanto al tiempo, no hay ninguna mención, pero como en todo el teatro griego, la acción cumple con la unidad de tiempo: todo se desarrolla en el plazo de un día.

D.     DIÁLOGO.
El diálogo está formado por intervenciones cortas, simples y directas, que aportan mucho dinamismo.
El parlamento de Tiresias, sin embargo, alcanza más sobriedad y trascendencia, puesto que está anunciando los terribles males que se ciernen sobre el personaje de Edipo (sin que este lo sepa).

E.     ACOTACIONES.
Las acotaciones, es decir, las anotaciones del texto referidas a la actuación de los personajes, el decorado o la iluminación, son prácticamente inexistentes en el teatro griego. Tan solo aparece una acotación:  (Al lazarillo), para indicar la presencia de un personaje en escena que no interviene en el diálogo, y es un simple guía del ciego Tiresias, que ya comienza a retirarse.

F.     LENGUAJE Y RECURSOS LITERARIOS.
El lenguaje es vivo, directo, de léxico sencillo, especialmente en el diálogo inicial, con numerosas preguntas y estructuras imperativas: “¿Qué has dicho? Repítelo…”  “¿No lo has entendido?” “Eh, tú, muchacho, llévame”
Incluso aparecen insultos:  “¿Es que hablé a una piedra?” “eres ciego de ojos, de oído y de entendimiento”.
Aparecen también recursos retóricos que embellecen estéticamente el mensaje:
- Antítesis, unidas a la paradoja y la ironía: “Tú tienes buena vista y no ves el abismo de males…” “si ahora ves luz, luego no verás más que tinieblas”, “caído de la opulencia en la pobreza”
- Las preguntas retóricas están igualmente cargadas de ironía, puesto que su interlocutor desconoce la respuesta (no así el público): “¿Sabes, por ventura, de quién eres hijo? ¿Tú no te das cuenta de que eres un ser odioso a todos los individuos de tu familia…?
- El texto se cierra con una estructura paralelística, con la que trata de reafirmar la terrible situación en la que vive Edipo (parricida, incestuoso): “hermano y padre de sus propios hijos; hijo y marido de la mujer que lo parió, y comarido y asesino de su padre.”

4.     CONCLUSIÓN.
En este texto, donde se muestra la ironía del terrible destino que se cierne sobre Edipo, queda patente la maestría de Sófocles al tratar el sufrimiento de la humanidad sometida al criterio de los dioses.